Eréndira Aragón
Por decreto presidencial se extinguen 109 fideicomisos federales. Es claro que un gobierno que toma las riendas de la administración pública tiene todo el derecho y la razón de revisar y reorientar el uso de los recursos públicos. Después de casi 90 años de gobiernos Prianistas, famosos por su corrupción y la entrega de los recursos de los mexicanos a manos privadas, muchas de ellas extranjeras, ¿cómo no vamos a apoyar esta medida?, especialmente después de que se determinó que el 93% de los fideicomisos no tienen mecanismos claros de rendición de cuentas y transparencia. Muchos de ellos con costosas estructuras administrativas y otros con dudoso destino de sus recursos, como es el caso del FONDEN entre muchos otros.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo este lunes 19 de octubre que los fideicomisos desaparecieron porque escondían irregularidades y corrupción, porque no existía una rendición de cuentas.
Regeneración publicó el primero de octubre que se desvía 40% de los fideicomisos de CONACYT al sector privado. Según dice Álvarez-Buylla en el sexenio de Peña Nieto caímos en el tema de ciencia y tecnología del lugar 56 al 72 en eficacia en ciencia y tecnología. Durante su mismo gobierno se transfirieron 17,819 millones de pesos, sin embargo, se destinaron solamente 2, 931 a proyectos de ciencia básica. Así lo dijo la directora de CONACYT durante el seminario “El retorno de lo público”. Publica también que, siendo directora adjunta del CONACYT, Julia Tagüeña desvío 50,000,000 de pesos a una asociación civil y esperemos que esto se investigue.
Parte de estos fideicomisos de CONACYT se los llevaban empresas como Kimberly Clark de Claudio X González y algunas otras empresas que realmente no requieren mucho apoyo del gobierno y que se quedaban con estos fondos que de otra manera hubieran parado en manos de quienes realmente los necesitan.
Restaurantes, los parientes de secretarios y funcionarios, en fin, innumerables son las reparticiones del dinero del pueblo a los compinches de las estructuras del poder. Tal es el caso de Daniel Chertorivski quién recibía millones de pesos de CONACYT de los cuales no entregaba cuentas. Este señor es dueño de restaurantes de lujo y ahora es millonario.
Otro fideicomiso que llama la atención es el de reparación de casas de los magistrados como si su salario no les alcanzará para repararlas ellos mismos. Los fideicomisos manejados por la suprema corte de justicia de la nación rebasan la cantidad total de su presupuesto anual para el 2021. Parte de este dinero se va a dirigir a el pago de pensiones adicionales argumentando que los funcionarios, cuando se retiren, deben seguir viviendo con dignidad. Otro rubro que cubrían estos fideicomisos es la atención médica privada, no vayan a tener que ir al ISSSTE o al Instituto Mexicano de Seguro Social los angelitos. Un guardadito de 15.5 mil millones de pesos tienen los magistrados en 12 fideicomisos. No les basta con sus exorbitantes sueldos.
En el tema de Indecine, aparece Eugenio Derbez recibiendo millones de pesos y produciendo unas películas de pésima calidad si es que se hizo con ese dinero, lo cual es pecata minuta comparado con miles de millones que corren por otros cauces. La película “No se aceptan devoluciones” de Eugenio Derbez nos costó 10,000,000 de pesos en un fideicomiso, dinero que se entrega a un productor millonario en vez de a jóvenes y talentosos cineastas. En lugar de ello se le entrega a este millonario productor para hacer una película de tercera calidad.
El Gato Político publicó el 16 de octubre que Josefina Vázquez Mota recibió 1000 billones de pesos de un fideicomiso para migrantes. Ella es de los que se oponen a que desaparezcan los fideicomisos. No es de extrañarse. El destino de estos fondos para los migrantes no está claro.
Otro de los que están señalados por esta opacidad en los fondos es Vicente Fox quién recibía un fideicomiso por 20,000 millones de pesos, especialmente en el área de aduanas, creando empresas que se alimentaban de recursos públicos asociado con Gil Díaz, quien fue secretario de hacienda en el gobierno de Salinas de Gortari. Francisco Gil Díaz fue férreo defensor del secreto fiduciario de manera que no se fiscalizaba el dinero de los fideicomisos aunado esto al cobro ilegal de impuestos por trámites aduanales (derecho de trámite aduanero También conocido como DPA) que no llegaban a la tesorería y cuyos delitos ya prescribieron.
Agustín Carstens, ex-presidente del Banco de México recibía un fideicomiso de $1,095,000 para su comida. Otro misterioso fideicomiso es para Sabritas, a través de Frito-lay. La Universidad Iberoamericana tenía fideicomisos del CONACYT. Mientras sus estudiantes se oponen a acabar de los fideicomisos, están recibiendo becas, siendo que son estudiantes de familias acaudaladas que están en una de las universidades más caras de México.
Esperemos que el gobierno revele toda la información que existe sobre estos fideicomisos y así sabremos dónde quedó el dinero, dónde quedó la bolita
Otra cosa que llama la atención es que los recursos de los fideicomisos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) incrementaron en 1,048% entre el tercer y cuarto trimestre del 2019 y siguió aumentando en 2020 principalmente (94%) en el Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar. Un notable aumento en el rubro militar.
Los mexicanos tenemos confianza en nuestro gobierno y en que se van a atender la protección a los derechos humanos y el desarrollo de la cultura, la ciencia y la tecnología, la atención a desastres naturales, teniendo como prioridad, la atención de la salud y la recuperación económica en esta pandemia por Covid-19. Esta situación de emergencia requiere acciones decididas y oportunas para salir adelante y minimizar los daños.
Ya hemos constatado la transparente entrega de apoyos que el gobierno ha dado sistemáticamente a los ciudadanos y sabemos que estos recursos llegarán a su correcto destino.
Confiamos en que se protegerá a periodistas y luchadores por los derechos, se promoverá la cultura y el desarrollo tecnológico y se cuidará la salud de los mexicanos, evitando la corrupción al tener control del manejo de estos recursos. ¿Cuál es la necesidad de utilizar a fiduciarias, es decir a un tercero en la administración de los recursos? Se mantendrán los apoyos, pero lo demás se reintegrará a la tesorería y se aplicará a la salud por el tema del Covid-19.
Los recursos recuperados se van a aplicar a la atención de la emergencia por COVID-19. La compra de vacunas va a ser un enorme gasto y ahora se está haciendo la precompra para que no sea el arrebato a última hora y poder también tener la vacuna en forma temprana y oportuna. Esta vacuna se va a aplicar en forma universal. Se requieren enormes gastos para atención médica de los enfermos, etc.
Por otro lado, las preguntas que nos hacemos son, cuántos eran los fondos que se han invertido en años pasados en los fideicomisos y a dónde fueron a parar, si fueron usados para lo que fueron destinados, los resultados e informes de los fideicomisos, a quien se benefició, quienes eran las fiduciarias que manejaron los fondos, salarios y costos de las estructuras administrativas, si se determinará si hubo acciones ilegales o irregulares y si se actuará al respecto, etc.
¿o es borrón y cuenta nueva?
Fuentes:
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