- Voz de la Revolución – TML Weekly. No 26. 18 de Julio 2020
Los trabajadores de Longshore organizan una manifestación masiva y marchan en Oakland, California para conmemorar a Juneteenth, y los trabajadores de otros puertos de los Estados Unidos organizaron acciones similares.
Millones de personas en todo el país están exigiendo que las instituciones liberales de gobierno que ya están quebradas sean reemplazadas por instituciones modernas que estén de acuerdo con las necesidades de los tiempos.
Para hacer frente a esta creciente resistencia, un aspecto de la campaña de desinformación de los gobernantes en los Estados Unidos es que el único papel para "el pueblo" es apelar al Estado, y a sus gobiernos en vigor en un momento determinado, para que lleven a cabo los cambios que la política requiere.
La gente según ellos debe limitar sus batallas a presionar a los que están en el poder para hacer lo correcto y justo. Sin embargo, la cultura de resistencia evidente en los Estados Unidos, presente y pasado, en realidad revela lo contrario: fueron los propios esclavos quienes fueron el factor fundamental para ganar su liberación en la época de la Guerra Civil de los Estados Unidos, luchando junto a los trabajadores del sur y del norte para eliminar el poder esclavo y por su derecho a participar en la vida política del país.
El movimiento de hoy, con los trabajadores y jóvenes afroamericanos y los trabajadores de todos los ámbitos de la vida que juegan un papel importante, tampoco está satisfecho con la simple reforma del viejo orden. Está exigiendo cambios fundamentales y comienza a definir lo que son. Se están tomando muchas medidas en comunidades de Estados Unidos para informar y movilizar a la gente para dar expresión a los cambios que la gente desea. El pueblo está confiando en sus propias fuerzas organizadas para lograr cambios que les favorezcan.
También los pueblos indígenas siguen defendiendo sus tierras y luchando por el reconocimiento de sus derechos. Trump eligió hablar en el Monte Rushmore, que se encuentra en tierras sioux que nunca fue sin cedida. Wounded Knee, lugar de una masacre estadounidense de cientos de niños, mujeres y hombres en 1890, está a sólo 75 millas de distancia.
También es el lugar de repetidas redadas organizadas por el FBI contra los nativos americanos exigiendo que sus derechos sean respetados en la década de 1970, incluyendo el asesinato de docenas de personas. El organizador Leonard Peltier fue acusado de asesinato durante una incursión de 1975. Sigue siendo hoy uno de los presos políticos más longevos en las cárceles de Estados Unidos. Peltier fue deportado de Canadá a pesar de las pruebas de que estaba siendo incriminado bajo el engaño de que la demanda estadounidense de su extradición cumplía con los requisitos del tratado de extradición entre Canadá y Estados Unidos. El estado estadounidense se niega a liberar a Peltier porque no renunciará a la lucha de los pueblos indígenas y continúa uniéndose a los esfuerzos de organización. [1]
La lucha más reciente de los protectores del agua en Standing Rock, unidos por personas de todo el país e incluso del mundo, es un ejemplo más de la calidad decidida e implacable de la resistencia de los pueblos indígenas en los Estados Unidos y la demanda de reconocimiento de sus derechos, tal como lo definen, no el estado estadounidense genocida.
Para nuevas relaciones y una democracia moderna
Las concepciones promovidas por los gobernantes de que es el Estado quien determina la sociedad y que la Constitución determina la democracia y las instituciones democráticas y que éstas son las mejores del mundo y eternas se promueven para ocultar el conjunto de relaciones sociales entre los seres humanos y los seres humanos y la naturaleza. Ocultan lo que estas relaciones revelan, que es la necesidad de empoderamiento de la gente para abrir el camino de la sociedad hacia el progreso.
Es la sociedad, con su conjunto de relaciones humanas entre los seres humanos y los seres humanos y los seres humanos y la naturaleza, la que proporciona la base para el Estado, no al revés. Se afirma que el Estado es independiente y externo a lo que sucede en nuestras vidas. De hecho, los gobernantes impusieron un Estado que está encima de la vida de todos y entra en todos los aspectos de la vida, como está muy claro hoy en día.
Sin embargo, sobre la base de la concepción egoísta del Estado neutral, externo y perfectamente concebido, se ignoran las relaciones humanas existentes en la sociedad. En cambio, se supone que la gente mira al Estado, a sus gobiernos e instituciones y a la Constitución como fuente de cambio.
Lo que hay que mirar es la relación directa que las personas tienen de producir su forma de vida, sus relaciones con la naturaleza y con todos los seres humanos. Estas relaciones revelan que las relaciones de poder existentes que mantienen a la gente fuera de la toma de decisiones, debe cambiar.
El resultado de las batallas actuales dependerá de hasta qué punto la gente vea y comprenda esta necesidad de cambio, la necesidad de llevar a cabo las transformaciones profundas que la historia exige. Trump, las elecciones, la desinformación que el estado determina el ciudadano y los derechos de ciudadanía, están diseñados para bloquear incluso mirar esta necesidad para el poder político y para luchar por la toma de decisiones en el aquí y ahora. Depende de la gente determinar lo que se necesita, tanto en el contenido como en la forma, proporcionar la misma pertenencia al cuerpo político. La pertenencia dado que pertenecemos a ese cuerpo político es suficiente para ser un ciudadano, para ser una persona que goce de los mismos derechos y deberes en ese cuerpo político.
La necesidad del cambio significa que el pueblo debe armarse con su propia manera de mirar el mundo y todas sus relaciones humanas, su propia perspectiva, política e instituciones. Sólo así pueden ver y hacer realidad un futuro brillante para sí mismos como parte integral de la humanidad misma.
Voice of Revolution es una publicación de la Organización Marxista-Leninista de Estados Unidos.
Nota
1. Peltier ha sido parte de las protestas actuales al igual que otros presos políticos como Mumia Abu-Jamal, cuya presencia en el movimiento actual que azota a los Estados Unidos se siente de innumerables maneras. Abu-Jamal es un periodista y activista político incriminado en 1982 por el asesinato de un oficial de policía en Filadelfia. Fue condenado por asesinato, condenado a muerte y después de la lucha concertada, condenado a cadena perpetua. Muchas personas, especialmente las mujeres, en los campos de detención de Trump también han expresado su apoyo y demandas a través de huelgas de hambre y otros medios.