Leona Guerrero
Durante el periodo de 2018 México exportó productos agroalimentarios por alrededor de 25.790 millones de dólares. El valor de las exportaciones agroalimentarias tuvo un aumento anual de 9,1 por ciento en los primeros nueve meses del pasado año frente al mismo lapso de 2018, tras llegar a los 28.538 millones de dólares.
La balanza agroalimentaria de México con el mundo registró un superávit de 7.336 millones, luego de que el país importó alimentos por 21.203 millones de dólares. Representando un incremento de 44,2 por ciento a tasa anual con respecto al mismo lapso de 2018 y representó un récord histórico.
Las hortalizas, frutas y bebidas fueron los principales productos de exportación al concentrar más del 60 por ciento, con el 21, 20 y 20 por ciento de participación, respectivamente.
El “crecimiento” económico es evidente a través de los datos, pero, ¿realmente quien se beneficia con estas cifras?
Primero, vamos a desmenuzar algunos de los productos agroalimentarios (incluye productos de origen agrícola, ganadero, pesquero y origen agroindustrial) agroindustriales consta de: cerveza, Tequila y mezcal, productos de panadería, azúcar, hortalizas cocidas en agua o vapor, jugo de naranja congelado entre otras; el agrícola incluye los productos como Aguacate, jitomate, pimiento, coles, fresas guayaba, mango, melón sandia y papaya, así como cítricos frescos o secos.
Algunos de los principales productos que se exportan son la cerveza, los productos de panadería, chocolate y otros preparados con cacao, así como los productos de café te o yerba mate, productos de cereal tostado o inflado, el aguacate, café sin tostar, algodón entre muchos otros.
Las principales empresas agroindustriales de México son Grupo Modelo, Bimbo, Marinela, Maseca, Lala, Gruma, Nestlé, Gamesa, Soriana, etc.
Estas empresas principalmente son intermediarios abaratando los bienes en donde el afectado es el productor además de que para llevar acabo los procesos de empaque las ganancias aumentan por las malas condiciones laborales de sus empleados como las prolongadas jornadas laborales, salarios por destajo, etc.
Es necesaria la regulación de estos monopolios, así como subsidios para pequeños y medianos productores, en tanto el consumidor mexicano es importante que adquiera sus productos en mercados, tianguis, etc. ¡Ayudemos a fortalecer la economía local!