Leona Guerrero
Después del triunfo electoral del 2018 en donde resultó electo Andrés Manuel López Obrador, actual Presidente de la Nación Mexicana se esperaba un cambio de 360 grados en las políticas públicas y cambios en pro del pueblo, así como, de las y los trabajadores.
El pasado 22 de Julio en la conferencia presidencial matutina “La mañanera”, en presencia del secretario de hacienda Arturo Herrera que por cierto, en su anterior empleo de 2010 a 2018, colaboró en el Banco Mundial como Gerente de Práctica: Gobernanza Práctica Global, Servicio Público y Desempeño para América Latina y el Caribe, Mario delgado Diputado federal y Coordinador de la bancada de morena, Ricardo Monreal Senador y coordinador en el senado de la bancada de morena, Carlos Salazar Lomelí Presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Aceves Secretario General de la confederación de trabajadores de México, se presentó la Reforma a las pensiones en México.
En esta reforma, el modelo pretende perpetuar en términos del manejo de las cuentas individuales y la administración privada de las cuentas de los trabajadores le da continuidad a un sistema probado en otros países que el resultado no ha sido satisfactorio. Ya que las personas reciben pensiones miserables.
Se incrementa al 15% en 8 años la cotización para el pago de pensiones, se disminuyen las semanas de cotización 1250 a 750 para adquirir una pensión mínima garantizada esto se refiere a que el gobierno comprometido se está comprometido dar una pensión. Y esto implicaría más presión fiscal, por todas las personas que se vayan sumando a las filas de pensión garantizada. Los patrones van a absorber todos los aumentos en las tasas de cotización, lo que no se dijo o bien, si se leen las letras chiquitas dice que aumentaran al 13.87% solo a las personas de mayores ingresos mientras que de las de menos ingresos seguirán recibiendo una aportación de solo el 5.15% y el gobierno es donde entraría con la cuota social para atacar las desigualdades.
Este es un problema grave y acumulado desde 1997 y en que se instauró el modelo económico neoliberal y trascendente en el país que debe ser atacado. Ya que implican demasiados intereses para las administradoras del fondo del retiro.
Para asegurar una vida digna a las y los trabajadores de México es necesario que cuenten con un fondo de retiro considerable para que puedan alcanzar un estado de bienestar integral ya que dicha reforma representa un avance, sin embargo, esta inclinada hacia los intereses particulares de un sector que saca raja de los ahorros de los trabajadores, que velará siempre por su interés particular y no por el bienestar colectivo.
Recordemos que México ha implementado la privatización de pensiones por medio de las AFORE por recetas de la OCDE y el FMI, cuyas fórmulas tiene a México en la quiebra y a las corporaciones en jauja. La pensión digna es un derecho humano irrenunciable, no debe ser negocio de nadie y además han de garantizarse. Solo el estado a través del sector público puede responsabilizarse de garantizar este derecho.