El glifosato es un herbicida de amplio espectro, que fue desarrollado para la eliminación de una amplia variedad hierbas y arbustos, lo que significa que tiene efectos sobre la mayor parte de las especies de plantas verdes, este químico ingresa a través de las hojas, después viaja hacia otras partes del tejido vegetal generando con ello la reducción de proteína y en consecuencia la reducción y muerte de la hierba. Algunas plantas han desarrollado resistencia al glifosato lo que significa que los agricultores tengan que aumentar cada vez más y más la dosis.
El principio activo del herbicida Roundup es el glifosato producido por Monsanto, este producto es de cobertura total, y puede no afectar a las especies resistentes al glifosato, esto debido a las modificaciones genéticas realizadas; como por ejemplo el maíz, algodón, canola y soya entre otros. Numerosos estudios demuestran que el glifosato es nocivo para el medio ambiente; ya que contamina la tierra, el agua y el aire, afectando con ello la salud de personas y animales. En el caso de humanos se han realizado estudios científicos en el que queda demostrado que el glifosato es letal para las células humanas, según un estudio, dosis muy por debajo de las recomendadas para su utilización provocan muerte celular en embriones humanos, por lo que se considera que también podría generar abortos y mal formaciones. Está comprobado que el glifosato es nocivo para el organismo ya que puede ocasionar desde problemas hormonales, de reproducción, alteraciones en la estructura del ADN, provocar muerte celular en el hígado, alteraciones en el sistema endocrino, colitis, gastritis, afectar el sistema nervioso central, producir problemas renales crónicos y diversos tipos de cáncer. El glifosato es uno de los herbicidas más utilizados a nivel mundial, está señalado por provocar múltiples afecciones en la salud. Sin embargo son pocos los países que tienen restricciones para el uso de este herbicida.
La OMS considera este herbicida como posible cancerígeno desde el 2015.
La industria alimentaria no quiere tener la menor pérdida en su producción, no tiene escrúpulos, generan ganancias millonarias a costa de la salud de la población mundial. En nuestro país es todavía más grave el problema, debido a que las autoridades consienten a transnacionales como Monsanto la venta de estos productos con ingredientes activos considerados como altamente peligrosos sin ninguna medida control. En nuestro país tenemos que frenar los permisos autorizados de estos productos en cualquiera de sus usos. Tenemos que regresar a cultivar la tierra como nos enseñaron los pueblos originarios, nuestros abuelos, amando y respetando la tierra, cultivando, granos de maíz, hortalizas, frutas, caña de azúcar, café, etc, libres de agroquímicos.