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El pago de la deuda desangra al Presupuesto 2022

Héctor Torres, Septiembre 2021


1.- Las perspectivas económicas del Presupuesto 2022


Los Criterios Económicos para el año 2022 establecen que el PIB crecerá en 2021 en 6.3%, para 2022 será de 4.1%, para 2023 en 3.4% y en 2024 del 2.8%. Con esas proyecciones México tendrá un crecimiento promedio anual del 1% en todo el sexenio. Pero en términos de PIB per cápita estaríamos peor porque el PIB por cabeza en todo el sexenio crecería en 1%. Estas proyecciones del crecimiento económico de la SHCP no son las que requiere nuestro país. México necesita crecer a tasas mucho mayores para combatir la pobreza que se agravó con la pandemia y la crisis, para poder recuperar 600 mil empleos perdidos, para proporcionar un millón de empleos anuales a las nuevas generaciones y para abatir el empleo informal que ocupa a más de la mitad de la fuerza de trabajo y que carece de prestaciones sociales.

Definitivamente se requiere un presupuesto de gastos que sea realmente detonante e impulsor del crecimiento económico y del empleo, además que recupere el poder adquisitivo del salario contractual que sigue deprimido (en 2019 crece en 1.71%, en 2020 en 0.99% y al mes de agosto de este año tiene crecimiento negativo de - 0.21%). Con salarios deprimidos no se incrementa el consumo interno y en consecuencia tampoco la producción nacional. Se requiere de un programa económico emergente de gran estímulo al gasto público, sobre todo al gasto social en salud y educación y a la inversión productiva. en los sectores público y social de la economía.


El Presupuesto 2022 de la SHCP se basa en el contexto internacional y establece, como lo dice el FMI, que la economía mundial crecerá en 6% porque se han aplicado las vacunas y se recuperan las economías. Pero lo cierto es que ello ocurre en buena medida porque los países ricos han impulsado políticas de gasto público cuantiosas, más del 10% del PIB lo han utilizado para reactivar sus economías e incluso aplicando impuestos a los ricos como es el caso de Biden en Estados Unidos. Pero en los países pobres y en los llamados emergentes la situación no es así y la recuperación no es igual a la de los países ricos. El paquete de Derechos Especiales de Giro que asignó el FMI en apoyo a la economía mundial sirve de poco a los países pobres y empobrecidos como México. Buena parte de la recuperación de México es por el crecimiento de las exportaciones manufactureras que demanda el mercado estadounidense en el marco del TEMEC y el empleo en esas grandes industrias de exportación ya se recuperó, pero en otros sectores del mercado interno sobre todo en los servicios, el comercio y la construcción no hay visos de recuperación sostenida ni tampoco en la pequeña y mediana empresa que no exportan.


2.- Presupuesto austero y con déficit.

El gasto para 2022 será de 7 billones 48 mil 206 millones de pesos, un aumento real del 9% con respecto al presupuesto aprobado en 2021; pero con respecto al gasto estimado en 2021 el crecimiento real del gasto es de apenas del 1.5%. El gasto tiene un limitado crecimiento real y es insuficiente para acelerar con fuerza la recuperación del país. Y ello obedece a que las finanzas públicas se mantienen débiles, no hay ninguna política para fortalecerlas como sería el aumento de los impuestos a los que más tienen o suspender el pago de los intereses de la deuda. Los ingresos para 2022 suman 6 billones 173 mil millones de pesos (el 21.9% del PIB, cuando en 2016 fue de 24.1%) y para compensar el gasto del 2022 el gobierno plantea un déficit de 876 mil millones de pesos (el 3.5% del PIB) y un límite de endeudamiento interno y externo por 1 billón 12 mil millones de pesos. Dado que los ingresos no cubrirán el gasto presupuestado el gobierno incurrirá en déficit y, en consecuencia, en contratar deuda. Los ingresos públicos deben y pueden ser fortalecidos mediante una reforma fiscal progresiva y no pagar el servicio de la deuda.

3.- El Costo Financiero de la deuda aumenta.

El presupuesto de egresos plantea para 2022 un costo financiero de 791.5 mil millones de pesos, cuando el aprobado para 2021 fue de 724 mil millones de pesos. Hay un aumento real del 5% (con respecto al estimado de 2021 el aumento real es de 7%). En pesos de 2022 el costo financiero aumentaría en 40 mil millones de pesos.

Para 2022 el costo financiero de la deuda interna y externa del gobierno federal presupuestado será de 580.6 mil millones de pesos, el costo de la deuda de PEMEX es por 142.5 mil millones de pesos, para CFE es de 29.6 mil millones de pesos y los que se destina para “Erogaciones para los programas de apoyo a ahorradores y deudores de la banca”, que es lo del FOBAPROA, es de 38.9 mil millones de pesos, cuando el presupuesto aprobado para 2021 fue de 11 mil millones de pesos. El costo de la deuda para 2022 es el 2.8% del PIB.



4.- Los programas sociales y proyectos prioritarios.

Los programas sociales prioritarios del gobierno suman 447 mil millones de pesos, 350 mil millones de pesos menos que el costo financiero de la deuda pública.

El aumento de poco más de 100mil millones de pesos, en los programas sociales obedece al aumento de la pensión para adultos mayores.



La suma del costo de los programas y proyectos prioritarios es de 574.6 mil millones de pesos, cifra menor que el costo financiero en más de 200 mil millones de pesos.


5.- El costo financiero y el presupuesto de varias Secretarías.

El costo financiero de la deuda supera con creces al presupuesto de las secretarías de educación o de bienestar o de salud, que son las que tienen mayores recursos.



Tan solo el pago de intereses por el rescate bancario por 39 mil millones de pesos para 2022 supera al presupuesto de la STPS, de CONACYT, de la Secretaría de Cultura, de la de Marina, la de Economía y es casi igual al de Medio Ambiente y Recursos Hidráulicos. Por su parte el presupuesto 2022 para el IMSS es de 1,011 mil millones de pesos, pero más del 50% es para pensiones; para ISSSTE son 397 mil millones de pesos (mmp), y para PEMEX de 636 mmp y CFE 432 mmp. Sin embargo, el costo financiero de la deuda de 791 mmp supera el gasto destinado a PEMEX, CFE, ISSSTE y al del IMSS sin pensiones.

El gasto en educación para 2022 es aún menor en términos reales al de 2020 y sobre todo al de 2015 que ha sido el más alto. En Ciencia y Tecnología hay un ligero aumento, pero se mantiene por debajo como proporción del PIB al de 2015.

6.- Más deuda en el presupuesto: el límite de endeudamiento para 2022.

Para 2022 el gobierno propone un límite de deuda nueva por 1 billón 12 mil millones de pesos, lo cual equivale a un aumento real del 11%, con respecto a 2021.

El desglose es así: para deuda interna el límite es de 850 mmp, para deuda externa es por 3.8 mil millones de dólares (77 mmp), para PEMEX son 27.2 mmp más 1.9 mil millones de dólares y para CFE 4.1 mmp más 796 millones de dólares. Todo ello suma 1 billón 12 mil millones de pesos. Si el país se endeuda con otro billón más, la deuda pública total será de 13.5 billones de pesos para fines de 2022 y por tanto su costo financiero seguirá aumentando.

7.- Conclusiones:

El Presupuesto de egresos para 2022 es insuficiente para las grandes necesidades y retos de nuestro pueblo. Con ese presupuesto el crecimiento económico y la generación de empleos será muy limitado. Los países ricos van a crecer a un ritmo más rápido porque instrumentaron programas emergentes y de gran estímulo económico y elevaron impuestos a los ricos. En México no hay nada de eso porque si se aumentaran los impuestos a los que más tienen (impuestos a las grandes fortunas y a las transacciones financieras), se suspendiera el pago del servicio de la deuda, se reestructurara y se cancelaran las deudas ilegítimas como la del FOBAPROA (que asciende a casi un billón de pesos) habría recursos suficientes y finanzas sólidas para dar un mayor dinamismo y vigor a nuestra economía y hacerla más justa. El gasto público debe aumentar, y para ello debe haber ingresos públicos altos que deben provenir de una reforma fiscal progresiva y de la suspensión del pago del servicio de la deuda pública y de la cancelación de deudas inmorales como la del FOBAPROA.

Los recursos que se utilizan para pagar el servicio de la deuda pública son tan cuantiosos que desangran a otros presupuestos vitales para el pueblo como son atender la salud, la educación, el medio ambiente y en especial resolver la crisis hidráulica, el apoyo al campo, a las mujeres, a los pueblos originarios, el dar empleo digno a los jóvenes, brindar seguro de desempleo y pensiones dignas, apoyar a la micro, pequeña y mediana empresa, apoyar al sector social de la economía, a la ciencia y la cultura. Mientras tanto la deuda crece, se vuelve eterna, cuyo monto pagarán las siguientes generaciones que ven hipotecado su futuro para que los grandes capitalistas financieros, la oligarquía financiera, se siga enriqueciendo y acumulando más capital para producir más crisis, miseria, desempleo, pérdida de soberanía y un futuro sombrío e incierto que atenta contra todos los derechos humanos de los mexicanos.

Por que frente a la crisis económica mundial y nacional y el abrupto frenón de la economía provocado por la pandemia de COVID-19 -la cual está lejos de concluir- es indispensable contar con cuantiosos recursos económicos, que hoy se van en el pago del servicio de la deuda pública, para enfrentar las necesidades básicas de las familias mexicanas, la pérdida masiva de empleos y cierre de ... nomasdeudapublica.org


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