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ELVIA CARRILLO PUERTO PIONERA DEL VOTO DE LA MUJER (1 de 2)

Pablo Moctezuma Barragán


El 30 de enero de 1881 en Motul, Yucatán nació Elvia Carrillo Puerto. Ella fue la sexta de 14 hijos que tuvieron Adela Puerto Solís y don Justiniano Carrillo Pasos, quien había emigrado al norte de la península con motivo de la “guerra de castas” y se dedicó al comercio de abarrotes.


El segundo hijo de ellos fue Felipe, gobernador socialista de Yucatán, y fundador del Partido Socialista del Sureste quien realizó profundas reformas antes de ser ajusticiado por enfrentarse a los hacendados y apoyar al pueblo maya. Sus hermanos más pequeños Benjamín, Edesio y Wilfrido también fueron fusilados junto con Felipe, otro de ellos, Acrelio sobrevivió, se dedicó al periodismo y fue director de El Socialista.

Al cumplir los 6 años la llevaban al Colegio Roque junto con sus hermanas Hermida, Enriqueta, Josefa y sus hermanos Felipe y Gualberto. La escuela fue fundada por la Sra. Benita Palma Vda. de Campos y tenía la ventaja que impartía una educación laica. Asistían ahí los hijos de los obreros del lugar, quienes por costumbre hablan la lengua maya entre sí. Por lo que, desde niña se percató de la situación de los trabajadores durante la dictadura porfirista y además la niña comenzó a aprender maya.

Así tuvo de niña educación básica y como le gustaba mucho leer, influenciada por sus hermanos Elvia fue en gran parte autodidacta. Tuvo en Motul un profesor que pertenecía al movimiento de la poetisa Rita Cetina, una maestra de Mérida, que editaba una publicación de mujeres que se llamó “La Siempre viva.” Leyendo a Rita, Elvia despertó a la idea de la equidad de género y a la reivindicación de los derechos de la mujer. Tras los años Rita Cetina fue el emblema de su lucha feminista.

Su conciencia social despertó en la convivencia familiar, en la tienda de su padre llegaban muchas personas y platicaban de sus problemas. Su hermano Felipe que era 7 años mayor que ella fue repartidor de ganado, conductor de trenes en el Ferrocarril de Oriente, visitaba Mérida, fue arriero y se involucró con los problemas del pueblo maya, explotado y vejado al máximo por la “Casta Divina”, convirtiéndose en su gran defensor, aprendió maya y fue encarcelado cuando organizó al pueblo maya de Dzununcán a derribar una cerca construida por los hacendados para evitar el paso de la gente.

Todas las vivencias de Felipe se las platicó a su hermana y hermanos quienes también se pusieron del lado de su pueblo. Todos ellos participaron en la fundación de un periódico bisemanal llamado “El Heraldo de Motul” que editaba Felipe, Elvia aprendió mecanografía, lo que le serviría toda la vida. Era un periódico valiente que criticaba a las autoridades y hacendados.

Elvia y su familia también tuvieron mucha relación con el sacerdote anarquista Serafín García, quien por cierto estaba contra el alto clero, las autoridades porfiristas y los hacendados. Su pensamiento era muy atrayente para los Carrillo Puerto. Ya en su juventud se convencieron de la justeza de las ideas socialistas.

Elvia se había casado a los 13 años con un profesor bohemio y ella tuvo que sostener a la familia, manteniéndose independiente de sus padres que la invitaban a vivir con ellos. Pero se acercaban tiempos turbulentos y Elvia se comprometió paso a paso cada vez más con las luchas sociales y políticas, a partir de 1909 se involucró de lleno en la lucha revolucionaria y esto la fue distanciando de su marido que creía que “su mujer” debería de atenderlo y permanecer en el hogar.

Olegario Molina Solís, el gobernador porfirista de Yucatán había sido electo en 1901, reelecto en 1905 y en 1906, cuando fue nombrado ministro de Fomento del gabinete de Porfirio Díaz, a través de Enrique Muñoz Arístegui, siguió gobernando despóticamente el estado de Yucatán. Olegario Molina era, la cabeza de la oligarquía de hacendados henequeneros, unas 30 familias millonarias que han venido a conocerse como la Casta divina.

Cuando ella tenía 16 años su hermano recorrió el estado apoyando al candidato Delio Moreno Cantón que se oponía a Don Porfirio. Fue candidato en 1907 y 1909 pero hubo fraude para imponer al candidato de la dictadura Enrique Moreno Cantón. Por cierto, en la segunda ocasión también fue candidato José María Pino Suárez por el Partido Antirreeleccionista. 

Como Elvia había aprendido a hablar maya, fue muy importante en la lucha contra el gobierno porfirista de Yucatán Molina Solís, ella también apoyaba la campaña de Delio Moreno. Y se involucró a fondo como propagandista, mensajera, y traductora al maya de los mensajes revolucionarios. Pero además se concentró en la organización de las mujeres y en la lucha por sus derechos. Elvia se había convertido en maestra en su natal Motul y como tal tenía influencia social. Y las luchas anti reeleccionistas y anti porfiristas que se habían desarrollado en Valladolid, en 1909 y 1910, marcaron el comienzo de su lucha política y social. 

Felipe se volvió peligroso para los ricos y los hacendados y los testaferros del General Díaz contrataron a Néstor Arjonills para matarlo, pero Felipe lo mató en defensa propia, y aunque esto fue claro, aprovecharon la situación para encarcelarlo. Al cumplir su condena tuvo que exiliarse de Yucatán y optó por irse a Morelos con Emiliano Zapata. Esta relación profundizó aún más los ideales de la familia Carrillo Puerto y de Elvia. Siempre rebelde. 

El movimiento de Madero tenía la bandera de: Sufragio Efectivo, No Reelección. Pero ella sabiendo que las mujeres, a pesar de ser la mitad de la población, no podía votar comenzó a promover la idea de hacer valer el sufragio femenino, su educación, sus derechos todos.

En 1910 participó Elvia como espía y correo en el llamado Plan de Dzelkoop, rebelión armada contra el gobernador de Yucatán, Enrique Muñoz Arístegui, títere de Olegario. Juntos Elvia y su hermano Felipe, impulsaron el movimiento, que vino a conocerse "Primera Chispa de la Revolución Mexicana.

Y una vez logrado el derrocamiento del viejo régimen porfirista, Elvia organiza, en 1912, la Liga de mujeres campesinas, la primera en México. Durante años organizó a las madres de sus alumnas y a muchas mujeres. Tras el golpe y usurpación de Victoriano Huerta ella siguió adelante con su lucha, enfrentando a los hacendados y a la reacción que, en Yucatán, tierra de los henequeneros esclavistas era muy fuerte. Elvia sabía que se jugaban la vida, pero seguía adelante con valentía. La clase obrera despertaba y luchaba, cuando era muy peligroso porque los movimientos huelguísticos eran reprimidos hasta con metralla por el ejército federal de Huerta.

En 1912 su esposo Vicente Pérez Mendiburo, la demandó por “no obedecerlo”, de hecho, como él estaba gravemente enfermo ella sostenía el hogar con su sueldo de maestra en el liceo.  Vicente expresó en su demanda que cuando Elvia obedecía sus órdenes “su vida era feliz, sonriente y dulce” pero que desde 1906, es decir desde que ella comenzó a participar en la vida pública la convivencia se convirtió para él “en una fuente de amarguras” así exigió el divorcio, ella contra demandó, pero resulta que al poco tiempo murió Vicente y Elvia quedó viuda muy joven. Elvia estaba casada con Vicente desde 1900 y había procreado con él a un niño, Marcial, y a una niña, Gloria, fallecida poco después de nacer.

Tras la derrota del usurpador Victoriano Huerta se estableció el carrancismo, el primer gobernador constitucionalista, Eleuterio Ávila, luego de la derrota de Huerta y el triunfo de Carranza siguió con esta línea represiva, pero Elvia mantuvo la organización de sus ligas de mujeres campesinas en medio de todas las dificultades. La lucha seguía. (Continuará...)


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