Frente a los golpes de Donald Trump contra México ha sido digna la respuesta del Presidente Andrés Manuel López Obrador. Importante la declaración de AMLO que se va a defender a todos los migrantes, no solo a los mexicanos. El presidente de EU está molesto con AMLO por las posturas de defensa de la soberanía que ha apoyado México, frente a muchas situaciones, como la de Venezuela, y la tensión binacional aumenta.
La situación se complica dado el pleito –peligroso- dentro de EU y que se agudiza de cara al enfrentamiento entre sí de las corporaciones norteamericanas ante el declive de su país. Aumentan las contradicciones entre la población y Trump, los partidos demócrata y republicano, el Ejecutivo y el Legislativo, la Federación y algunos estados, las agencias de inteligencia, sectores militares y hasta al interior del equipo de Trump quien actualmente está amenazado con el impeachment y presionado por ganar las próximas elecciones. Con sus bravuconadas, que toman la migración (que ellos provocan) como pretexto, la facción cupular de Trump busca afianzarse y para superar su crisis interna desata crisis externas. Guerra comercial, provocaciones y sanciones no solo contra México, contra China, Irán, Venezuela, Cuba, Alemania, Unión Europea, etc.
México defiende su soberanía y una vez más la realidad nos muestra que la dependencia y sometimiento hacia EU que impulsó el PRIAN , no trae más que desgracias y que más vale ser libres e independientes.
La reacción de los mexicanos dentro de México y también de los mexicanos en EU es la de unirnos y enfrentar a las corporaciones norteamericanas y al presidente Trump, por lo que “el tiro le puede salir por la culata”.
Dice Trump que México se a aprovechado de EU, cuando ha sido todo lo contrario y que los migrantes “invaden” su país, cuando en realidad 30 millones de migrantes han sido explotados al máximo, en lo que es toda una esclavitud moderna, y han sido un sostén permanente para la economía norteamericana.
Es grave que la militarización de la frontera EU-México se vea acompañada por soldados gringos en Guatemala, tal como anunció Trump. Así, desde el punto de vista militar está “encapsulando” a México lo que es una gran amenaza.
La imposición de aranceles a México ya golpeó nuestra economía, el peso, los mercados y agudiza el peligro de recesión. Este impacto es mayúsculo por el grado de sometimiento económico que tenemos con respecto a inversiones extranjeras, dependencia de organismos financieros internacionales manejados por Washington, pago de la deuda externa, dependencia comercial, destrucción de la planta productiva nacional que nos han vuelto altamente vulnerables.
Enfrentamos tiempos de crisis que pueden ser tiempos de cambio y transformación. Solo saldremos adelante rompiendo lazos de dependencia hacia EU y al exterior de todo tipo, económico, político, social, cultural, militar y defendiendo la soberanía. Es momento en el que todos nos opongamos a las corporaciones norteamericanas y a su gobierno imperialista. Que conozcamos y apoyemos las luchas de pueblo y trabajadores de EU y Canadá y apoyemos a los pueblos que están siendo sujetos de ataques por parte del Imperio Yanki, formando un gran frente antiimperialista y por la soberanía de los pueblos.
La integración con EU, la “alianza estratégica” que impulsaron Peña y Calderón, el TLC, la ASPAN, la Iniciativa Mérida, la apertura y defensa a los intereses de las grandes corporaciones norteamericanas, han demostrado que no traen nada bueno más que colocarnos a la cola de un gigante herido que aumenta las tensiones y el peligro de una guerra mundial en la que va a querer que seamos parte de su carne de cañón.
México tiene todas las posibilidades de emprender un desarrollo independiente y rescatar la soberanía económica, política, cultural, militar. Tenemos recursos y trabajadores muy calificados, hay reservas. Debemos impulsar la soberanía energética, industrial, alimentaria, etc. Si suspendemos la sangría de las corporaciones norteamericanas y en general, el pago de la deuda externa, los privilegios y prebendas para la inversión extranjera, de ahí saldrán todos los recursos necesarios para nuestro desarrollo.
Es la hora en que el pueblo mexicano va a recordar que no hay nada más valioso que la libertad y que la lucha por la soberanía será la vía para superar todos los problemas que nos impone el Imperio Yanki, que la política de integración a EU es una política de traición a la Patria. Es hora de unirnos y derrotar a los enemigos de México.