top of page
  • Foto del escritorMexteki

OUTSOURCING



ZAPATA


El actual modelo político económico imperante aún en México y el mundo ha generado que se agudice la precarización laboral de los y las trabajadoras; en los últimos años, con la legalización del “outsourcing” o subcontratación como modelo de empleo, se ha garantizado que los únicos beneficiarios sean los dueños de los medios de producción y no los que generan como tal la riqueza, que es la clase trabajadora.

La subcontratación aunque ya existía en nuestro país, el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa permitió que fuera legal con la reforma de 2012, esto a pesar del amplio rechazo popular. Dicho modelo en México permite que el empleador no reconozca como tal a los trabajadores que “contrate”, sin ningún compromiso con sus derechos, ni garantías que la lucha obrera alcanzó con el paso del tiempo. El “outsourcing” lo vendieron como un modelo que permitiría sobre todo a los jóvenes, empleos más flexibles de acuerdo a sus necesidades, que sería mayor el pago debido a que se realizaría por hora y no necesariamente por jornada. Lo único que se obtuvo fueron contratos de mes a mes o anuales en el mejor de los casos, sin reconocer la antigüedad del trabajador; por tanto, sin generar mejoras en sus prestaciones o de plano sin dar prestación alguna.

En México con el nuevo gobierno, se tienen expectativas de que este modelo criminal de simulación en la relación obrero patronal finalice de una vez por todas. Han sido varias las declaraciones de funcionarios públicos federales a este respecto; sin embargo, como sociedad no debemos quedarnos de brazos cruzados. Es vital que la organización de la base social, si se amerita, respalde las acciones que se impulsen desde el Congreso de la Unión, y que si éstas no son suficientes, se siga presionando para ir hasta el fondo y alcanzar la totalidad del trabajo digno y bien remunerado, uno que incluya la más amplia cobertura en la seguridad social, pensiones y jubilaciones que garanticen una vida digna para todo trabajador, sin importar el cargo o sector del laboral.

bottom of page